El proceso de almacenamiento
El almacenamiento es un proceso técnico del abastecimiento y sus actividades están referidas a:
1. Ubicación de bienes;
2. Custodia de los bienes;
3. Control de los bienes.
Todo ello para asegurar sus condiciones óptimas, evitar una utilización no autorizada y facilitar su traslado a los usuarios que los requieren.
El proceso de almacenamiento consta de las siguientes fases:
a) Recepción: a partir del momento en que los bienes han llegado a las instalaciones del almacén; termina con la ubicación de los mismos en la zona de tránsito y su puesta a punto para efectuar la verificación y control de calidad.
b) Verificación y Control de Calidad: consiste en revisar cuantitativa y cualitativamente los bienes recibidos, para determinar que estén de acuerdo con las especificaciones técnicas solicitadas y que las cantidades remitidas coinciden con las requeridas.
c) Aceptación: acción de aceptar o rechazar el ingreso de un bien entregado por un proveedor, en función del resultado del proceso de verificación y control de calidad realizado previamente. No se puede aceptar un bien que no cumpla con las características físicas, químicas, funcionales o administrativas especificadas en su orden de compra.
d) Internamiento: comprende las actividades que sirven para ubicar físicamente los bienes en los lugares previamente asignados.
e) Registro y control: es la actividad que consiste en registrar los datos referentes a los movimientos de almacén para efectuar las acciones de control sobre su custodia y operación.
f) Custodia y mantenimiento: tiene la finalidad de conservar los bienes almacenados con las mismas características físicas, químicas, funcionales o administrativas en que fueron recibidos, así como efectuar su limpieza y mantenimiento.
Comentarios
Publicar un comentario