CADENA DE SUMINISTRO EN COLOMBIA

 CADENA DE SUMINISTRO EN COLOMBIA


En resumen, de todo lo anteriormente descrito quiere decir que las empresas, además del factor determinante de diseño e innovación, tienen el gran reto de administrar en las cadenas de suministro el ciclo de vida de sus productos. Manuel Acero, es un especialista en integración de cadenas de suministro de MIT y director del Supply Chain Council para Suramérica, nos dice que de la misma manera como los productos han evolucionado, la logística en el mundo competitivo está cambiando a unas velocidades sorprendentes, al punto de que el concepto de logística, como tal, evolucionó al de administración de cadenas de suministro. Sin embargo, a nivel regional y local, lo primero que hay que hacer es un examen sobre cómo estamos y cómo nos observan en el mundo en general, es importante tener en presente a los países con los que se cuenta actualmente tratados de libre comercio y los que ven en nuestro país una potencia comercial, ellos pretenden vender sus productos en Colombia y viceversa. Esto nos va a convertir en un país perteneciente a cadenas de suministro a nivel global, en donde la dispersión geográfica juega un papel importante. 

El hecho de estar cerca de Estados Unidos es una ventaja comparativa que logísticamente tendríamos que aprovechar. También nuestro país tiene que tener en cuenta es su infraestructura la apertura de nuevos mercados. La Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, califica a los países con los que tiene relaciones comerciales con indicadores de 0 a 10, siendo cero lo más óptimo y diez la más pobre, indica que Colombia en asuntos de regulación en aduanas y comercio exterior tiene una calificación relativamente buena de 2,5. No obstante, hay otros indicadores muy preocupantes para su comercio internacional como el relativo a la velocidad que se genera en las cadenas de suministro en los aeropuertos para ser competitivos, en este aspecto nos da una calificación de 6,11; en puertos, 7,44; en disponibilidad de recursos complementarios como las vías de acceso a centros productivos y de financiamiento para proyectos de cadenas de suministro, 6; en seguridad en la infraestructura para toda la cadena de comercio industrial, 8,5; lo cual indica que el reto en seguridad de Colombia ante el mundo es muy grave. Frente a la globalización los empresarios colombianos tienen el gran reto de pensar con mentalidad global, eso significa crear empresas flexibles a cualquier tipo de mercado. Esa es la clave del éxito. Esto implica que el empresario debe adoptar una serie de procesos logísticos que le van a permitir una labor de análisis de sus mercados en un contexto global. Tradicionalmente, los empresarios latinoamericanos son buenos competidores hacia adentro, pero deficientes hacia fuera. Hoy, gracias a la globalización, los empresarios tienen el gran reto de convertirse en empresas largoplacistas, es decir, tener estrategias logísticas y de producción montadas para más de diez años. Además, deben que tener una visión de procesos orientados a la demanda. Esto significa que las empresas tienen que diseñar dos contextos, uno transnacional con una logística expedita, no costosa, donde el flujo de materiales vaya a la velocidad del mercado, y otro, el de diseñar procesos de administración de la demanda. Una empresa que administra bien su demanda tiene lo que debe tener en su cadena de suministro, de lo contrario, o tiene faltantes o tiene excesos de inventario en su cadena de suministro. (Acero, 2006).

En la actualidad el país sostiene tratados comerciales de gran talante con diferentes países, y cuando la competencia logística en el mundo se hace cada vez más fuerte, algunas empresas en Colombia se han puesto en la tarea de darles un mayor valor agregado a sus procesos y una calidad y seguridad a la cadena de suministros, que incluso sobrepase fronteras.

A esto se suma el hecho que se han creado una serie de normas internacionales, para establecer requisitos específicos que garanticen la protección de los procesos que influyen en la gestión de la seguridad de la cadena de suministros de las empresas. 

Según el presidente de la Asociación de Empresas Seguras, Carlos Farfán Echeverry, en la actualidad el país tiene 25 empresas certificadas con la norma NTC - ISO 28000, que hace referencia al sistema de gestión de seguridad en la cadena de abastecimiento. (Business Alliance For Secure Commerce, 2017) 

Sin embargo, el único operador logístico certificado en Colombia, y hasta a nivel mundial con este proceso, es Suppla, que recibió este reconocimiento para sus compañías Suppla Cargo, Agencia de Aduanas, Suppla Nivel 1 y Serviceuticos”. 

Para el gerente nacional de seguridad de Suppla, “la compañía decidió buscar esta certificación no sólo por el carácter estratégico, desde el punto de vista de seguridad, sino también como una iniciativa que reafirmara los estándares manejados mediante una norma internacional reconocida”. 

Con esto, la empresa garantiza estrictos controles desde el comienzo (o con el productor de las materias primas hasta el cliente), los cuales fortalecen la eficiencia en las operaciones, la rentabilidad del negocio y la efectividad comercial, lo que se traduce en ventajas competitivas en el mercadeo, que la diferencian de otros operadores. 

“Lo que se persigue es mejorar la seguridad, estableciendo un proceso de análisis de riesgos e implementando acciones de mejora y monitoreo, con el fin de prevenir incidentes o eventos que puedan afectar a la organización, en general”. 

Los procesos: Cuando se realiza el análisis de riesgos, se implementan unos controles, que son los que aseguran la trazabilidad para que el cliente tenga la información, en tiempo real, de su mercancía, que llegue a su destino en perfecto estado y completa. “Lo mejor es que la NTC 28.000 puede aplicarse en organizaciones de cualquier tamaño, en la fabricación, en servicios, en el almacenamiento, en el transporte por mar, carretera, vía aérea o por ferrocarril; y en las diferentes fases de producción o suministro”.

Establecer riesgos: Para garantizar el proceso de seguridad en la cadena de abastecimiento de cualquier empresa es necesario que el operador logístico haga una gestión de riesgos, para así ofrecer mayor confiabilidad de sus servicios. 

Se debe hacer una identificación de los peligros que pueden correr los productos o la empresa a la cual se le prestan los servicios. Por tanto, hay que preguntarse qué puede pasar, cómo puede pasar y porqué puede pasar. Luego, es necesario hacer un análisis de riesgos (determinar la probabilidad de que se pueda presentar), como también establecer el impacto o las consecuencias que se podrían generar. Igualmente, se hace una lista priorizada de riesgos. Se toman los de mayor impacto y se trabajan de forma inmediata. Posteriormente, se implementan las medidas que minimicen ese riesgo. Y, finalmente, se hace un observatorio para medir si todos los procedimientos están haciendo efecto”. (Echeverry , 2012)




Comentarios